Digital making in educational projects
Digital Making as an Educational Project es una experiencia educativa innovadora que se ha llevado a cabo con estudiantes de los grados de Educación Primaria y Educación Social durante tres años consecutivos. La experiencia introduce la creación digital como una actividad en la que los estudiantes crean un objeto utilizando tecnología digital. En el proceso, no solo obtienen una idea de cómo funciona la tecnología, sino que también aprenden el contenido y las competencias del plan de estudios. Esta práctica docente innovadora se llevó a cabo como investigación de acción para mejorar las prácticas tradicionales de educación superior. En este sentido, la propuesta coloca al alumno en el centro del proceso como autor y protagonista de su propio proceso de aprendizaje. La experiencia se basa en sus propios intereses: deciden qué hacer en función de un contexto dado. Los estudiantes trabajan en grupos y buscan lo que necesitan aprender para superar un desafío particular, mientras que el maestro apoya el proceso como facilitador, ofreciendo orientación y recursos cuando sea necesario. La evaluación de todo el proceso se regula a través de un diario grupal (un documento en línea compartido) y un diario individual (un blog) que producen los estudiantes. La evaluación final no es solo del producto impreso; los estudiantes también producen un video en forma de narración de cuentos, en el que explican cómo evolucionó el proceso desde la idea inicial hasta la impresión final del objeto. También reflexionan sobre lo que han aprendido, cómo ha funcionado el trabajo en equipo y qué posibilidades creen que ofrece la creación digital en los contextos educativos primarios y no formales en los que trabajarán. Todos los procesos se compilan en los blogs de los estudiantes, así como en los cuadernos de campo de los maestros. La experiencia se ejecutó en colaboración con los Centros de Fabricación Digital de Barcelona. Los resultados se organizaron para resaltar las fortalezas y debilidades del uso de tecnologías para mejorar la educación superior, ofreciendo un enfoque en el que los estudiantes están en el centro de todo el proceso. Fortalezas: fuerte motivación del estudiante, promoción del aprendizaje autodirigido y colaborativo y aprender haciendo, y familiarización con una integración transformadora de la tecnología como protagonistas. Debilidades: vacilación y resistencia a enfrentar el desafío, gestión del tiempo escaso, gran inversión de tiempo por parte de los docentes y la dificultad de lograr una reflexión profunda sobre cómo se podría introducir la fabricación digital en contextos educativos como la escuela primaria y contextos no formales.